Friday, July 20, 2007

transformaciøn!



Nuestro organismo y todos los componentes de este ecosistema del que formamos parte se mantienen en una postura de cambio constante que ni la muerte, en el sentido que le asignamos en occidente, puede contener; pues con su llegada la cadena de carbono que nos forma se descompone en algunos elementos del CHON (carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno) y así continuamos activamente en el ciclo natural.

Con la culturización como herramienta nos imponen normas masificadoras y valores ajenos que en algunos casos sólo contribuyen al desajuste, desdibujando así, la particularidad que nos diferencia unos de otros más allá de las características físicas, con el único fin de obtener un borrón difuso de personalidad dúctil y maleable para las conveniencia del sistema.

Somos seres con vocación innata a las transformaciones, mas durante el aprendizaje en esta occidental sociedad nos hacen creer lo contrario…

La vida cada minuto nos altera, nos renueva… sin percibirlo células microscópicas inertes se convierten en polvo con cada paso que damos, mientras que a cada segundo nace una nueva célula en el interior de nuestra piel y todo esto pasa desapercibido a nuestros ojos…

Quienes me conocen sostienen que mis silencios son una clara señal de peligro y cuando niña eran sinónimo de horrendas travesuras, mas con el tiempo he logrado descubrir que esos terribles huracanes emocionales en que me sumergo durante los periodos de mutismo son síntoma de transformación y cuestionamiento.

Durante este mutis confieso que he leido mucho (cuál será el superlativo de mucho?), me he intoxicado de palabras, voces, experiencias, visiones; he transpirado con las alucinaciones cinematográficas de mentes iluminadas; he trasladado mis propios huesos a lugares escondidos entre las colinas de mi cerebro y a destinos lejanos más allá del horizonte azul profundo, pero sobretodo me he dedicado con toda mi energía a apuntalar mi fortaleza algo debilitada por las contrariedades de la rutina.

Limpié mi armario? Sí, también… incluso purgué algunos miedos infantiles de mi sistema.

Al fin, comprendí que día a día cambiamos un poco, que cada persona que se cruza en mi camino tiene una enseñanza que debo aprender e interiorizar, sin importar su status u origen... es un error tratar de mantenerme inmutable, es un comportamiento contra natura, soy materia y la ley dice que la materia está en constante transformación.

En una revista médica leí que nuestro cuerpo se regenera completamente cada cierto tiempo, no sólo los reptiles cambian de piel, los humanos de particular manera actualizan sus tejidos según las necesidades y condiciones del medio gaseoso en que se trasladan.

Estoy conciente que ha ocurrido un cambio, una transformación en mi interior, luego de un proceso arduo y sostenido he logrado nutrir una faceta propia que durante mucho tiempo había mantenido descuidada a voluntad.

Ahora he vuelto, soy la misma, pero no soy igual…

* al que adivine el lugar exacto de la foto le doy un kilo de brownies de premio! Sólo se aplica al que de pelos y señales, como un GPS... :D

3 comments:

Anonymous said...

cambio, transformación, es inevitable
pero que quede la esencia es importante, eso y tu risa sonora, esa que te caracteriza
yo de vez en cuando me doy cuenta que he cambiado en algunas cosas, que tengo nuevos sentimientos, nuevos pensamientos, dan vuelta y vuelta y soy la misma pero no soy igual
abrazos desde el sur

Anonymous said...

Voy a cobrar mis negritos este domingo, yo se la respuesta con santo y seña

Unknown said...

andrea: mi risa sonora te acompaña en esa ciudad gris por donde hoy habitan tus pasos! Si, somos las mismas pero no somos iguales que aquellas, ya ni los cañones son los mismos Carlitos!

Dragona: ya me contó un pajarito que te gustaron las postales :) bacano! Leí en un libro que ningún lugar está lejos para los amigos.

T-o: escríbalo para comprobar la efectividad de su salvo conducto T-o, el domingo no habrá negritos, pero si pie de mandarina :)