desarticulando tu silencio!

"Cúbrete el rostro
y llora.
Vomita.
¡Si!
Vomita,
largos trozos de vidrio,
amargos alfileres,
turbios gritos de espanto,
vocablos carcomidos;
sobre esta nauseabunda iniquidad sin cauce,
y esta castrada y fétida sumisión cultivada
en flatulentos caldos de terror y de ayuno.
Cúbrete el rostro
y llora...
pero no te contengas.
Vomita.
¡Si!
Vomita,
ante esta paranoica estupidez macabra,
sobre este delirante cretinismo estentóreo
y esta senil orgía de egoísmo prostático:
lacios coagulos de asco,
macerada impotencia,
rancios jugos de hastío,
trozos de amarga espera...
horas entrecortadas por relinchos de angustia."*

Abro los ojos con la angustia apretándome la garganta y tu voz intensa colmando mis oídos, otra vez el mismo sueño espantando la tranquilidad de mi mente... es la tercera vez en menos de una semana que te veo entre la bruma que provoca Morfeo al poseerme. Sobre mi, el atrapasueños bailando con la ligera brisa de la madrugada...

Qué estará ocurriendo más allá de tu silencio?

Ajena a los desniveles de tu rutina y los sobresaltos de tus humores, muerdo mis labios y mantengo fijos mis dedos aunque mis ideas se escandalizan hasta la histeria de la calma, hoy se me hizo imposible omitirte de mis palabras desarticuladas abriendo así la muralla infranqueable más allá de tu silencio...

* Invitación al vómito/Persuasión de los días/Oliverio Girondo, escritor argentino