Tuesday, October 23, 2007

espacio/tiempo!


Sentado en un coche de hielo

Que se derrite cada amanecer, no puedo
Pedirte que te quedes hasta mañana
Pedirte que me enredes hoy en tu pelo
Quisiera ir de la mano de este sentimiento que llevo tan dentro
Y me cuesta tanto, tenerte callado cuando te encuentro
Con la Luna Llena, Melendi

Esto empieza con mucho sueño, son casi la hora 7 de un nuevo día… en mi cuarto tipeando lo más rápido que puedo los pensamientos que el sueño me deja articular, me debato entre contestarte las últimas noticias de tu agitada ciudad y acostarme bajo mi cobertor rojo en esa pequeña cama que desde hace muchos años le brinda descanso a mis huesos…

La última frase me llegó directo al fondo de mi sensibilidad, más de una ocasión ese pensamiento ha cruzado veloz mis neuronas, siempre me digo que en esta ciudad mercantil hacen falta voces y oídos con quién compartir mis insomnes pensamientos para asociarse en vaciar sin remordimiento una botella de tinto o un amigo con quien acompañar un café recién colado mezclado con nicotina humeante…

Estas herramientas que nos brindan los avances tecnológicos para mantenernos al día con la rutina, aún no pueden reemplazar la calidez de un abrazo o una franca carcajada, ahora revisando mi archivo noto que no te he escrito desde hace casi un mes… luego todo nuestro contacto se ha limitado a la mensajería instantánea, pero eso no significa que la calidad del diálogo o el intercambio de ideas haya disminuido, pues todas esas charlas compartidas de jornada laboral nos ha permitido acercar más nuestros reflejos al espejo de la vida, pese a la todavía infranqueable distancia geográfica que por ahora nos separa…

He dilatado tanto escribirte, postergando cada vez más estas frases por dormir o por destilar el mal humor mirando el techo de mi dormitorio, pero sincerándome contigo de la única forma que tengo, pues en este mundo la mejor estrategia para sobrevivir con la consciencia tranquila y quieta es la franqueza debo reconocer ante tus ojos que esas palabras que enviaste a mi PObox me acariciaron de tal forma que no pude dejar de identificarme con ellas… es de cierta manera un conjunto de sentimientos que yo misma he experimentado en los fragmentos emotivos que forman mi vida…

Me asombra como las palabras parecen replicar las imágenes poéticas que en otro tono y con mayor informalidad sin rima o métrica yo misma he compuesto… los sentimientos son universales, según parece las circunstancias que nos motiva a escribir poemas, relatos melancólicos, cuentos, sonetos son tan generales que alguien como tú o alguien como yo desconocidos formalmente podemos crear líneas paralelas de nuestras emociones y encontrar similitudes tan fantásticas como asombrosas… las emociones humanas tienen un carácter universal que hace que en diferentes espacios y tiempos estas converjan...

6 comments:

Carlos Paredes Leví said...

Tenemos que reivindicar el escribir cartas, aunque �stas sean tan rid�culas como las de amor

Unknown said...

Dragoncita: hay algo para usted viajando ya por correo...

Carlos: Tan ridículas como el amor, ese es un título que podríamos sugerirle al amigo Fortunato... el otro día compré un libro que registraba la correspondencia de Truman Capote con sus amigos, geniales esas cartas... es una lástima que es detalle se este diluyendo entre emails, chats y más... dígame anticuada pero a mi aún me emociona recibir cartas...

Carlos Paredes Leví said...

y yo todav�a soy de esos obsoletos individuos que las escribe...

Unknown said...

y la caligrafía que tal?

Venga señor Leví, le invito un café ardiente sin canela, pero tan amargo como nos gusta... Son pocos los que aún caminan sin prisa hasta la oficina postal para franquear todas sus ideas en un sobre firmado con tinta fresca y muchas emociones...

Carlos Paredes Leví said...

yo soy de esos pocos, por eso estoy, darwinianamente, destinado a la prematura extinci�n...

Unknown said...

no solo usted... todos los extraños seres (citando a Calamaro) que aún cojugamos ese viejo artes somos una especie que desaparece (volviendo a citar al argentino con sangre judia de Calamaro!)...

Hoy, estoy de lo más pesimista... no hay mucha luz en el futuro...