emoción al vino tinto

05:59 am

Nos llego el lunes y con el la despedida a este fin de semana que resultó estrecho entre tanta música, vino y charla. No somos los mismos de antes, el cansancio nos pinta sombras bajo los párpados y se delata con brillos escarlata en nuestras melenas. "Pasó nuestro cuarto de hora, pero aún sabemos reír", nos dice el rosarino.

Ahora, debemos dormir, unos instantes, unas horas. La cantidad exacta, poco importa. Estamos obligados a detenernos...

Incluso aunque la voz de Calamaro descansa con todo y sus perdones, jamás se cansa de repetirnos que aún nos quedan más aeropuertos, mientras Fito nos bendice con su voz...

Cuando despertemos dejará de interesar como la causalidad nos obligó a vernos las caras... cómo de a poco cada uno fue cediendo a la nostalgia... como las veinteicuatro horas del día nos quedaron chicas...

Mañana al salir de esta habitación deberemos enfrentarnos a las caras largas, los reclamos, las muecas de los cretinoides e incluso romperle el espejo a los vanidosos, pero hoy durante este amanecer ningún reproche podrá enturbiar esta alegría...

Ahora lo único que rompe el silencio son las aspas del ventilador que calma el calor de nuestros cuerpos...

* Y sin embargo, te quiero. Olga Román y Joaquín Sabina.
Aún la oigo y me estremezco... Una esas joyas que albergamos en la memoria de los conciertos que hemos compartido...